El clima está poniendo a prueba a los sistemas de asistencia en medio de la pandemia de coronavirus a causa de nevadas inusualmente fuertes en zonas de la Patagonia y la región cuyana, con temporales de viento y fuertes heladas, que mantienen aisladas hoy a distintas localidades y parajes del sur del país.

En Neuquén, el temporal de nieve y lluvias registrado la semana pasada produjo el corte de rutas, anegamientos y problemas en poblaciones vulnerables que debieron ser asistidas, aunque no hubo evacuados, según informaron las autoridades.

El paso internacional Pino Hachado está cerrado desde hace tres días por la acumulación de nieve y hielo sobre la calzada, y por el viento blanco que ha impedido a los equipos viales trabajar en el lugar.

El gobierno provincial informó que el operativo de ayuda consistió en la entrega de leña, garrafas de gas, agua mineral, víveres, frazadas y ropa de abrigo en un operativo que incluyó 304 máquinas viales y de trabajo, 242 vehículos utilitarios, 1.840 trabajadoras, trabajadores y funcionarios municipales, 10.500 familias asistidas y 1.080 viviendas reparadas.

En Río Negro, la situación también es difícil, por lo que la gobernadora Arabela Carreras confirmó que en la zona andina y en la región Sur, las intensas precipitaciones hicieron que se acumulara gran cantidad de nieve en los caminos.

«Fue declarada la emergencia agropecuaria en toda la zona porque los animales se están muriendo y los productores están muy preocupados», agregó la gobernadora y recordó que el gobierno provincial cuenta con un Fondo de Forraje, que se está distribuyendo entre los pequeños productores, pero se retrasó por el estado de las rutas.

El municipio de Bariloche registró despistes, cortes de luz, complicaciones en el tránsito, además de la muerte de una persona a causa de una avalancha en el Cerro Catedral. Por otro lado, el peso de la nieve congelada derrumbó los techos de los galpones de hierro y chapa de la planta de procesamiento de diatomea que la empresa Tierras Calamara tiene en cercanías de Jacobacci.

La Secretaria de Energía de Río Negro junto a Defensa Civil y Vialidad Nacional esperan cumplir con la entrega de garrafas del Plan Calor Hogares y la recargas de gas a los pobladores de la región sur, a partir de la apertura de los caminos que se encontraban intransitables. Más al sur, la cordillera, precordillera y parte de la meseta central de Chubut también están afectadas por el temporal de nieve, viento y fuertes heladas que obligó a constituir una base de operaciones en la zona de Cushamen, sobre el noroeste provincial, para asistir a los pobladores aislados.

El gobernador del Chubut, Mariano Arcioni, sobrevoló en un helicóptero del ejército la zona próxima a Cushamen donde se encuentran los 17 parajes más afectados por la nieve acumulada. Desde ayer, parte del gabinete provincial se constituyó en la localidad de Gualjaina para dar respuesta rápida a los requerimientos, para lo cual cuentan con asistencia del Ejército Argentino, la Gendarmería Nacional y la Prefectura que desplegó desde Comodoro Rivadavia un helicóptero con el cual evacuaron una familia ayer.

El jefe de la comuna rural de Cushamen, Ricardo Millahuala, reconoció en diálogo con Télam: «Hay 17 parajes que tenemos todavía que recorrer desde el aire y por eso pedimos a través de las radios que avisen a los pobladores que, si necesitan asistencia, revoleen algo rojo, una frazada, un trapo, un poncho, lo que sea».

Además, el temporal de nieve, acompañado por fuertes vientos, derrumbó 55 torres de alta tensión que llevan energía desde la represa Futaleufú (cerca de Trevelin) hasta Puerto Madryn atravesando 500 kilómetros en medio de la meseta del norte chubutense.

La salida del sistema no afectó la producción de aluminio de la firma Aluar que se abastece de esa energía porque cuenta con alternativas de ciclo combinado; a través de las recientes instalaciones de energía eólica.

En Santa Cruz, la tormenta ya presentó problemas a comienzo del mes de junio cuando una pareja de adultos mayores fue rescatada en Estancia Piedra Grande, a 250 kilómetros de Perito Moreno y 120 de Bajo Caracoles, en un operativo de más de 30 horas entre el 9 y 11 de julio pasado y la semana anterior una mujer embarazada y su hijo de 2 años quedaron aislados en estancia La Madrugada cerca de Perito Moreno, producto de las nevadas que afectan la zona cordillerana de Santa Cruz, informaron fuentes oficiales.

«Si bien los pobladores rurales están acostumbrados y preparados para estas contingencias, hace rato que no nevaba así y llega un momento en que quedan aislados», dijo a Télam Diego Farías, coordinador provincial de Protección Civil.

Fuente: Télam

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