Así lo señaló el mandatario local, tras recorrer los talleres del programa municipal Trayectorias Escolares en el barrio José Fuchs, una de las 17 sedes que ofrecen un complemento educativo para la niñez. El intendente entregó material didáctico e insistió en la importancia de generar estrategias para fortalecer los conocimientos.
Trayectorias Escolares es un programa municipal que funciona en 8 asociaciones vecinales y 9 centros de promoción barrial, como forma de complementar el acceso a conocimientos de niños y niñas de los distintos barrios de Comodoro, que por la situación de muchas escuelas no pueden contar con los contenidos necesarios. La enseñanza es de manera lúdica y con todos los elementos básicos para cada uno de los concurrentes.
En este sentido, el intendente Juan Pablo Luque visitó uno de los talleres en la Asociación Vecinal del barrio José Fuchs y sostuvo que “queríamos visitar este trabajo que estamos desarrollando con un proyecto de la Secretaría de Cultura junto a la ayuda de las empresas PAE (Pan American Energy) y CPC, a fin de llegar a la mayor cantidad de barrios posibles con el apoyo escolar”.
“En estos espacios los docentes trabajan diariamente brindando contención y sostén a quienes necesitan realmente, teniendo en cuenta que hace tres años tenemos problemas en materia educativa y es muy complicado poder avanzar con una ciudad, sin la educación que merecemos”, exclamó.
Asimismo –continuó- “con tantos años sin clases, no solo necesitamos refuerzos, sino que precisamos que los chicos tengan los conocimientos necesarios para pasar cada etapa educativa, donde cada vez son más exigentes, y luego se necesitan herramientas para su inserción laboral en el futuro, porque es primordial contar con una sociedad mejor formada”.
Para finalizar, reconoció que “sabemos que este programa no va a suplir bajo ningún punto de vista el rol que cumple la escuela, pero la Municipalidad puso a disposición este taller con el objetivo de empujar a los chicos a la inserción de conocimientos adecuados”, concluyó.
Por su parte, la tallerista de la vecinal del barrio José Fuchs, Antonia Morel, explicó que “estamos trabajando con niños de segundo ciclo, cuarto, quinto y sexto grado”.
En cuanto a su labor diaria, mencionó que “nos encanta ser talleristas porque hay una buena respuesta por parte de los chicos, se entusiasman con los trabajos a través de situaciones problemáticas, didácticas, juegos de lectura, lengua y matemáticas. Contamos con distintos libros que nos brindan desde Cultura y que nos ayudan a construir juntos un aprendizaje eficaz”, acentuó.
“Actualmente, la situación de los niños es variada porque cada uno tiene su propio proceso, hay estudiantes que les cuesta más que a otros. Sin embargo, trabajamos varios temas como vocales, sílabas a partir del texto de 9 a 12 años y como ahora están asistiendo de forma presencial en los establecimientos educativos, avanzamos en el refortalecimiento de los aprendizajes con mayor dificultad como matemáticas, comprensión de situaciones problemáticas y la escritura”, subrayó la docente.