Con presencia de funcionarios municipales, se realizó un sencillo acto con el izamiento del pabellón nacional en la flamante plaza 1 de mayo, renovada hace poco tiempo por el Municipio. Un sector que sufrió las peores consecuencias del temporal en 2017 y hoy piensa a futuro.
Durante la ceremonia simbólica estuvieron presentes el viceintendente Othar Macharashvili; la secretaria de la Mujer, Género, Diversidad y Juventud, quien además es vecina del barrio, Jimena Cores; el concejal Ariel Montenegro; autoridades de la SCPL y vecinos en general.
El barrio Juan XXIII fue rebautizado con ese nombre en la década del 70, mediante una resolución municipal. Previamente era denominado CoDePro, en referencia a la cooperativa de viviendas que se asentó en el lugar en los inicios.
Al recordar aquellas primeras épocas, el presidente de la comisión, Carlos Estevao, comentó que “la historia del barrio muestra la lucha de los vecinos para llegar a obtener todos los servicios que en su momento faltaban, como el agua, la luz, el gas y el transporte público que en los primeros años caminaban desde Canadá y Polonia hasta este lugar”.
Por otro lado, recordó la etapa más difícil, vivida durante la catástrofe del 2017: “Nos hizo retroceder 20 años hacia atrás, pero hoy volvemos a tener obras e inversiones, aunque todavía seguimos luchando por solucionar algunos problemas de infraestructura”.
En ese sentido, agradeció “la inversión municipal en el espacio público que tenemos en la Plaza 1 de mayo; la instalación de luminarias led en las calles; la renovación de cañerías de cloaca y agua con la renovación de la carpeta asfáltica; y nos queda terminar algunas calles de pavimento y mejorar parte de la infraestructura pluvial”.